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Concurso de Logos

         Para el desarrollo del proyecto Biodiversidad en Edificios “BIOED” del Instituto Alavés de la Naturaleza-Arabako Natur Institutua, hemos diseñado 3 logos.

Llevamos muchas discusiones sobre cual nos gusta más y hemos pensado que lo mejor es preguntar a nuestros seguidores en las redes. Vuestra opinión será como un voto y el logo más votado será el que usemos en nuestros comunicados y mensajes.

Alguno ya lo conocéis, pero otro es nuevo. Así que venga animaros y a opinar!!!!

 
Logo 1

Logo 2

Logo 3

 

PROYECTO BIODIVERSIDAD en EDIFICIOS

INSTITUTO ALAVÉS DE LA NATURALEZA-ARABAKO NATUR INSTITUTUA

Financiación aportada por EROSKI a través de la conciencia medioambiental ciudadana de Vitoria-Gasteiz.
 

info@ian-ani.org
 

Algún dia echaremos de menos a los gorriones.

Siempre han estado con nosotros. Son quizás las aves más conocidas junto a sus hermanas mayores las palomas. Pero a diferencia de ellas los gorriones comunes son cada vez menos abundantes. Nos parecían infinitos, inacabables, pero lo cierto es que se acaban son finitos. En algunas ciudades de Europa ya son solo un recuerdo. No sabemos muy bien porque. Quizás nuestro proyecto ayude a que sigan con nosotros mucho tiempo. Nos sentiríamos orgullosos de saber que gracias al impulso de unos cuantos voluntarios éstas pequeñas y traviesas aves seguirán alegrándonos con sus persecuciones y chillidos.

Juan Ramón Jimenez los describió soberbiamente. La verdad es que tras leerlo he preferido darle la palabra.

Gorriones

La mañana de Santiago está nublada de blanco y gris, como guardada en algodón. Todos se han ido a misa. Nos hemos quedado en el jardín los gorriones, Platero y yo.

¡Los gorriones! Bajo las redondas nubes, que, a veces, llueven unas gotas finas, ¡cómo entran y salen en la enredadera, cómo chillan, cómo se cogen de los picos! Este cae sobre una rama, se va y la deja temblando; el otro se bebe un poquito de cielo en un charquillo del brocal del pozo; aquél ha saltado al tejadillo del alpende, lleno de flores casi secas, que el día pardo aviva.

¡Benditos pájaros, sin fiesta fija! Con la libre monotonía de lo nativo, de lo verdadero, nada, a no ser una dicha vaga, les dicen a ellos las campanas. Contentos, sin fatales obligaciones, sin esos olimpos ni esos avernos que extasían o que amedrentan a los pobres hombres esclavos, sin más moral que la suya ni más Dios que lo azul, son mis hermanos, mis dulces hermanos.

Viajan sin dinero y sin maletas; mudan de casa cuando se les antoja; presumen un arroyo, presienten una fronda, y sólo tienen que abrir sus alas para conseguir la felicidad; no saben de lunes ni de sábado; se bañan en todas partes, a cada momento; aman el amor sin nombre, la amada universal.

Y cuando las gentes, ¡las pobres gentes!, se van a misa los domingos, cerrando las puertas, ellos, en un alegre ejemplo de amor sin rito, se vienen de pronto, con su algarabía fresca y jovial, al jardín de las casas cerradas, en las que algún poeta, que ya conocen bien, y algún burrillo tierno —¿te juntas conmigo?— los contemplan, fraternales.

(LXIII) De: Platero y yo     JUAN RAMÓN JIMENEZ

 

“BIOED”
PROYECTO BIODIVERSIDAD en EDIFICIOS
INSTITUTO ALAVÉS DE LA NATURALEZA-ARABAKO NATUR INSTITUTUA
Financiación aportada por EROSKI a través de la conciencia medioambiental ciudadana de Vitoria-Gasteiz.

 

¡¡¡ Amadas y odiadas…las palomas domésticas !!!

Dentro de nuestro proyecto BIOED, abordamos hoy uno de nuestros tabús la Paloma doméstica. Cuando hablamos con cualquier persona relacionada con la construcción para explicarles las bondades de nuestro proyecto nos sacar a relucir la Paloma en el primer minuto de charla. Es un problema que afrontan muchos constructores y la reacción a ello es blindar los edificios para todas las aves y murciélagos. Como muchas veces ocurre pagan justos por pecadores…si es que las Palomas han pecado en algo. Veamos un poco su historia.

La paloma bravía es la especie de la que han derivado las palomas domésticas que habitan en nuestras ciudades y pueblos. La especie silvestre es un ave de mediano tamaño, de unos 33 cm de altura, 65 cm de envergadura y unos 350 gr de peso y es de color gris pizarra con irisaciones verdosas y rosáceas en el cuello y con el obispillo blanco. Las formas domésticas tienen gran variedad de tamaños y colores.

 

 

El hombre decidió domesticar a la paloma hace aproximadamente 10.000 años, en la revolución agrícola del neolítico. Hubo un tiempo en el que tener una capilla y un palomar era un símbolo de estatus. Cada palomar podía acoger aproximadamente 100 parejas. Los excrementos se utilizaban como abono y los pichones como alimento.

Normalmente forman grandes colonias de cría, pero también se ven parejas diseminadas cuando se inicia la colonización de un lugar para ir aumentando año tras año si el lugar es idóneo. Son monógamas, tienen pareja estable. En las ciudades se pueden reproducir durante todo el año, dándose casos de hasta 5 nidadas en un año, aunque con especial intensidad en primavera y otoño. Cada nidada está integrada por 2 huevos, alguna vez 1 y muy rara vez 3, de color blanco. Al mes de nacer, ya son capaces de abandonar el nido y son capaces de reproducirse a los 6 meses de edad.

Es muy longeva, puede superar los 20 años, por lo que acumulan gran experiencia gracias también a su buena memoria.

En las ciudades pueden ser beneficiosas por la cantidad de desperdicios que retiran de las calles, sin embargo, en lugares donde se concentra una colonia, producen muchas molestias: ruido de arrullos de adultos y de pollos, suciedad, atascos de canalones, roturas en tejados, pero sobre todo, sus excrementos, que pueden provocar el deterioro de edificios, monumentos o estatuas, ya que son muy corrosivos.

Los lugares originales de nidificación de las palomas son los acantilados rocosos, en los cuales encuentran las cavidades donde ubicar los nidos. En pueblos y ciudades se refugia y reproduce en agujeros, huecos, tejados y terrazas de edificios, no sólo en los habitados, sino también en los que están en ruinas y otras construcciones abandonadas. La similitud que ofrecen los edificios de las ciudades con los lugares originales de nidificación hace que estos sean seleccionados positivamente por las palomas, en especial aquellos edificios más antiguos y que son los que presentan las cavidades y agujeros más indicados para la nidificación.

En las iglesias pueden utilizar cualquier hueco o cornisa para ubicar sus nidos, incluso en el suelo. Suelen colonizar campanarios, torres y bajocubiertas. La proliferación de individuos y la acumulación de excrementos, se produce cuando los propietarios o responsables del edificio, no realizan el control de la reproducción y las labores de limpieza adecuadas.

Se suelen aplicar medidas de gestión matando las palomas que hay en la ciudad, pero sólo se consigue que vengan las de la periferia a reemplazarlas; palomas que no podían entrar en la ciudad por la competencia interespecífica, lo hacen al desaparecer dicha competencia (Sol y Senar, 1991). Otros estudios indican que si se elimina 1/4 de la población, la colonia puede recuperar su densidad original en menos de 24 meses, e incluso aumentarla. En Barcelona, por ejemplo, la empresa que se encarga de los descastes de palomas ha sacrificado más de 227.000 palomas en 15 años y sin embargo la población ha aumentado un 95%.

En las iglesias se opta por cerrar herméticamente las estancias y de este modo, los propietarios o responsables, evitan tener que realizar controles y limpiezas. Esta medida, no selectiva, perjudica a las palomas y a otras muchas especies, algunas de ellas en peligro de extinción, de un modo indirecto por pérdida de lugares de reproducción y en algunas ocasiones, incluso directo, causando la muerte por inanición a individuos que quedan atrapados dentro.

TEXTO BASADO EN: Illana A. & Paniagua D. 2011. Análisis del impacto, sobre la fauna silvestre, de la rehabilitación de edificios utilizados como refugios.

 

 

PROYECTO BIODIVERSIDAD en EDIFICIOS

 

INSTITUTO ALAVÉS DE LA NATURALEZA-ARABAKO NATUR INSTITUTUA

 

Financiación aportada por EROSKI a través de la conciencia medioambiental ciudadana de Vitoria-Gasteiz.